Fuente: Reforma, Portada, Víctor Osorio y Natalia Vitela
El porcentaje de la población en México que prefirió atenderse males de salud en servicios privados y no en públicos pasó de 43 a 49 por ciento en este sexenio. De acuerdo con los datos de la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2022, revelados ayer, además de la disminución de atención en el sector público, se redujo el índice de vacunación infantil y crecieron dos indicadores sobre la mala alimentación: subió la obesidad y también la desnutrición con registros significativos de baja talla y bajo peso entre niños. En 2018, al finalizar el sexenio de Enrique Peña, el porcentaje de población que se atendía en servicios privados (consultorios, hospitales y farmacias) era de 43.4. Para el cierre de 2022, ya en el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador creció para ubicarse en 48.8 por ciento. Basta ver que 17.7 por ciento de la población se atiende en consultorios de farmacias privadas, casi la misma proporción de los que se atienden en clínicas de la Secretaría de Salud, que es un 20 por ciento. O bien, los que se curan en farmacias privadas son cuatro veces más que los que se atienden en el ISSSTE. La consulta en casa, con médico particular, fue de 22 por ciento.