Fuente: Vértigo Político, Bienestar
Más allá del aspecto estético, la piel es afectada en términos de salud cuando las personas que viven con diabetes no llevan un manejo adecuado de su condición. Identificar oportunamente lesiones o anomalías en la piel de las personas que viven con diabetes ayuda a conocer qué tan adecuado ha sido el manejo de los niveles glucémicos, e incluso, si se requieren ajustes en el tratamiento y estilo de vida. La Lic. Jacqueline Alcántara, educadora en diabetes de BD Ultra-Fine™, explica una situación común: “Cuando se elevan los niveles glucémicos en sangre, las defensas naturales del cuerpo se dan a la tarea de desechar el exceso de glucosa por medio de la orina. Esto hace que aumente la frecuencia de orinar, lo que provoca cierta deshidratación en la piel. Con esto, la piel se reseca, se adelgaza y se vuelve vulnerable a infecciones, sensibilidad, irritación, comezón y dolor”. Las infecciones cutáneas aparecen en el 20-50% de las personas con diabetes, especialmente en pacientes con diabetes tipo 2.