Milenio, Salud, Diana Barajas
De acuerdo con Adrián Daneri, coordinador de investigación del Centro Universitario de Ciencias de la Salud, (CUCS) de la Universidad de Guadalajara (UdeG) quien se ha enfocado a lo largo de más de 15 años en realizar investigaciones sobre cáncer de mama, hasta en la mitad de los casos, las mujeres no tenían un factor de riesgo identificable. “La población va envejeciendo y en general el cáncer se ve más a medida que más vivimos por eso es que se nota la diferencia y esto no quita que pudiera haber otros factores que no estén investigados. Este 50% probablemente a lo mejor no queda claro, a lo mejor es la suma de muchas cosas”, explicó. Por otro lado, de estos factores de riesgo, el que se ha vuelto más común en Jalisco y México es la herencia genética pues hay mutaciones que se transmiten de una generación a otra en los genes BRCA1 y BRCA2, lo que deriva en mayor predisposición a padecer cáncer de mama. “Cuando hay el antecedente genético y nosotros le hacemos una prueba, eso aumenta cerca del 60 al 70% según el gen que esté mutado, nosotros le llamamos una alteración, un polimorfismo diferente, puede aumentar hasta 60-70%”, explicó el especialista.