Fuente: Publímetro, Noticias
Los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH) están iniciando varios estudios para probar posibles tratamientos para las secuelas de largo plazo causadas por el COVID, un paso ansiosamente esperado en los esfuerzos de Estados Unidos contra la misteriosa condición que aflige a millones de personas. El anuncio del lunes del proyecto RECOVER de 1.150 millones de dólares de los NIH se produce en medio de la frustración de pacientes que desde hace mucho tiempo lidian con problemas de salud que a veces los incapacitan, sin tratamientos probados y sólo algunos estudios rigurosos. “Aunque esto llega uno o dos años tarde, y tiene un alcance menor de lo que uno esperaría, es un paso en la dirección correcta”, dijo el doctor Ziyad Al-Aly de la Universidad de Washington en San Luis, quien no está involucrado en el proyecto de los NIH pero cuya investigación destacó el costo del llamado “COVID prolongado”.