Fuente: Sol de México, Opinión, Gerardo Gutiérrez
El economista Luis Rubio da en el clavo sobre lo que le depara a México desde el arranque del próximo sexenio. De hecho, en ya menos de un año, a partir del 3 de junio: gane quien gane, del partido que sea, el país se encontrará en una situación delicada, con “la imperiosa necesidad de sumar voluntades entre grupos, partidos y ciudadanos que hoy se encuentran en distintos lados de las barreras –las reales y las artificialmente impulsadas por el gobierno actual– que hoy dividen a la población”. Un claro ejemplo: ante un sistema de salud roto. No es que antes de la actual administración pública federal fuera la panacea. Desde entonces eran evidentes las carencias, las distorsiones, la falta de cobertura y financiamiento. Muchos veníamos proponiendo la vía de generar un gran pacto nacional para renovar al sistema de salud, con una reforma hacendaria de fondo para hacer eso viable y con una fórmula sostenible.