Crónica, Nacional, Alejandro Páez
Pese al aumento del número de casos de cáncer en México, el presupuesto y los recursos para enfrentar esta enfermedad –que muchas veces es letal si no se atiende a tiempo–, ha ido a la baja con recortes en todas las áreas, subejercicios , falta de equipo, personal médico e infraestructura donde la población que no cuenta con seguridad social es la que más ha sufrido esta situación: Para la población sin seguridad social, la cobertura para diferentes tipos de cáncer es menor a 50%, y serían necesarios alrededor de 27 mil 4 mdp, esto es 3.5 veces el gasto del Fonsabi ( Fondo de Salud para el Bienestar, un fideicomiso público creado en 2019 para financiar la atención de enfermedades costosas y la infraestructura de salud) para lograr la cobertura total de casos de cáncer El gasto en las acciones relacionadas con la atención de cáncer de mama en la mujer no solo se ha reducido a la mitad, de 2017 a 2023, sino también ha presentado subejercicios de hasta 51.8% en 2023 en el Instituto de Cancerología (Incan), según un análisis del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP)
Además hay una disparidad importante en el tratamiento, calidad y costo de la atención de cáncer para pacientes del el IMSS y los que no cuentan con seguridad social. Por ejemplo, el costo promedio por paciente con cáncer de mama en el IMSS se estimó en $52,373 (IMSS 2024); mientras que, para este mismo concepto en la población sin seguridad social fue cuatro veces más, $210,732 en 2018.