Fuente: Financiero, Bloomberg, Andrea Navarro
Hablando de propósitos en la cena de Año Nuevo en diciembre pasado, no faltó quien estuviera decidido a perder unos cuantos kilos en el 2024. Un amigo, a quien llamaremos Pedro, ya tenía su plan. El 2 de enero pediría una pluma de Ozempic en Rappi y comenzaría a inyectarse una dosis de 0.25 mg por semana por alrededor de tres o cuatro meses. No necesitó receta ni indicaciones de un médico. Fue tan fácil como pedir tacos en la aplicación. La pluma con cuatro dosis de 0.25 mg le llegó directamente a su casa, le costó 3 mil 094 pesos y le duraría aproximadamente un mes. Dependiendo de los resultados, dijo que consideraría aumentar la dosis después de ese tiempo. Ozempic, una medicina del laboratorio danés Novo Nordisk A/S, fue concebida originalmente como tratamiento para personas con diabetes tipo 2. Funciona imitando una hormona en el cuerpo que se libera después de comer y trabaja estimulando la producción de más insulina, que a su vez ayuda a reducir los niveles de glucosa en la sangre. También retrasa el movimiento de la comida desde el estómago hacia el intestino, prolongando el sentimiento de saciedad.