Fuente: W Radio, Noticias, Rogelio Arizcorreta Rojas
La diabetes tipo 1 es una enfermedad crónica que obliga a los pacientes a un control constante de sus niveles de azúcar en sangre, lo que conlleva un impacto significativo en su calidad de vida. Recientemente, se han dado a conocer avances que podrían revolucionar el manejo de esta condición, lo que reduciría la dependencia de las inyecciones diarias de insulina y mejoraría significativamente el bienestar de quienes la padecen. Uno de los avances más destacados es el desarrollo de una “insulina inteligente”, una hormona diseñada para permanecer en el cuerpo y activarse únicamente cuando los niveles de glucosa lo requieran. Esta innovación busca imitar el funcionamiento natural del páncreas, es decir; que regule automáticamente los niveles de azúcar en sangre para prevenir tanto la hiperglucemia como la hipoglucemia. Aunque este proyecto aún se encuentra en fases preliminares y no ha comenzado los ensayos clínicos en humanos, su éxito podría reducir significativamente la carga diaria de los pacientes con diabetes tipo 1. Otra línea de investigación prometedora es la creación de una insulina de liberación lenta que solo necesitaría administrarse una vez por semana. Este tratamiento está diseñado para sustituir la insulina de acción lenta que actualmente los pacientes deben inyectarse a diario.